jueves, 19 de julio de 2012

21/04/2011 Hoy toca tango

He querido quedarme todo el día en el hotel para poder estudiar la ruta a seguir ya que si sigo aquí  mucho tiempo no voy a poder hacer el recorrido que he planeado.
En el comedor he conocido a Sussita Handa de Indonesia que me ha recomendado mucho su país Me ha escrito en mi libreta los lugares interesantes para visitar, mucha naturaleza y playas con clima excelente.

Se ha unido a nuestra conversación un alemán Stephen, como yo, ha tomado un paréntesis en su vida habitual para recorrer el mundo, no lleva ruta marcada y la cambia a su aire, hemos intercambiado experiencias y consejos.

Con todo esto se me ha ido toda la mañana, he comido una pizza con el alemán, Sussita se ha ido ya de vuelta a su pais.
Por la tarde me animé a poner una lavadora y mientras la maquina estaba trabajando acabé de ligar, vía internet, una excursión guapa que se inicia en Adelaide y acaba en Alice Springs con 10 días de recorrido variado:

1º día FlindersRanges.

2º día Wil Pena Pound.

3º día Oodnata Track.

4º día Coover Pedy.

5º día Simsons Desert.

6º día Dalhousie Springs.

7º día Uluru.

8º día the Olgas.

9º día Kings Canyon.

10º día western Mac`s.

Terminará en Alice springs donde cogeré avión para Cairns que está al norte frente al arrecife coralino, allí haré alguna inmersión, excursiones a las islas vecinas luego a Darwing (ya veremos...no quiero pensar más allá del siguiente paso a hacer).


He ido ha bailar tango en el único sitio que había milonga este día, lo vi por internet.

He pasado por una experiencia algo increíble, parece como si hubiera estado todo preparado para mí.

En recepción me indicaron como llegar a Rose Bay al noreste de Sidney en el Club Rudby, lugar de la Milonga. Para ir tenia que coger un tren hasta la estación de autobuses, luego un autobús.

La estación de autobuses estaba vacía, solo un joven, Mark se llamaba, leyendo un libro en un banco (mi ángel de la guarda). Le pregunté si era allí donde paraba el bus que yo esperaba y me dijo que sí. Empezamos a hablar muy animadamente hasta que pasados unos 20 minutos le pregunté si era normal que estuviera tan vacía la estación, estábamos solos, ningún bus pasaba, miró el reloj y me dijo que había olvidado que a partir de las siete los autobuses ya no pasaban por la estación que había que ir a cogerlo a la calle(?) que cosa más rara.

"Si no llegas a decírmelo paso toda la noche aquí esperando" le dije, fuimos varias calles caminando y charlando. Me explicó que el lunes es un día muy especial en toda Australia, es fiesta nacional, se celebra en honor a los muertos en la primera guerra mundial que se pasaban el día entero bebiendo (alcohol, claro) y era muy divertido.

Cogimos el autobús y me dijo que me acompañaría al sitio que buscaba él con su coche, llamó a su novia para que nos esperase en la puerta de su casa para darle las llaves. Me dijo me llevaría allí porque estaba muy oscuro y no lo encontraría.

Ciertamente estaba muy oscuro, son calles en la periferia de Sidney, sin alumbrado, solo alguna luz de los edificios. Tal como planeó, su novia estaba esperándonos, le dio las llaves. Mark me llevó en su coche.

Es increíble la amabilidad de esta gente es infinita o tengo mucha suerte porque si no me lleva segurísimo que me pierdo.

En la milonga saludé a Jenni y Chris que son los profesores que regentan la milonga que había hablado con ella por teléfono. Jenni está embarazada. Hicieron un baile espectáculo " gallina tango" y luego repartieron huevos de pascua de chocolate.


Conocí a Petter, un apuesto austriaco cincuentón que empezó a bailar hace unos meses, se sentó en mi mesa y me contó su vida (seguro que de psicóloga hubiera triunfado, todos me cuentan su vida). Mas tarde se unió a nosotros Karen,una jovencita preciosa que llevaba unas orejas de conejito que parece que es costumbre ponerse en Semana Santa.


La milonga es casi igual que las de Barcelona, con el mismo patrón organizativo: Clases primero, milonga con media parte que presentan nuevas actividades, rifa de regalo con el número que te dan en la entrada y actuación de los profesores.


Durante la media parte Chris anunció mi presencia, dijo que venía de España y me aplaudieron para darme la bienvenida.

Le dije al camarero que necesitaba dinero en efectivo para volver al hotel en taxi, no quería arriesgarme a perderme, me ha dado 20 dolares en efectivo cobrándomelos con la visa (eso es amabilidad, en otros sitios no te hacen eso)

Bailé mucho, con algunos mejor que con otros pero el que me hizo sentir que tenía alas en los pies fue un argentino que lleva 24 años viviendo en Australia y que baila tango desde hace 7 años.....Que suavidad, que naturalidad, una gozada.

Decliné la invitación de Daniel, que así se llamaba el argentino, de llevarme al hotel, preferí coger un taxi y no sentirme obligada, luego me arrepentí....que barbaridad¡ 26 dólares el taxi¡ me dijo el taxista que la tarifa nocturna era más cara.







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