jueves, 19 de julio de 2012

27/9/2011 Atrapada en el hotel, Yangon



Me lo dicen y no me lo creo, esto es peor que una pesadilla.

He vuelto a la agencia de viajes con la esperanza de que esta vez mi banco mande el código de transacción al móvil de Marta para poder acceder a esos dólares en efectivo que necesito para cualquier cosa que quiera hacer aquí, como por ejemplo, comer y dormir.

Estábamos conectadas por mail ya que no hay otra manera pues no se recibe señal de teléfono.

Una vez hecha la transacción a la agencia en cuestión se nos pide una clave que en teoría debía mandar el banco al móvil de Marta, pero………………………¿Será el destino que me quede encerrada en mi hotel durante quien sabe cuántos días hasta solucionar este problema? ¡vaya mierda de destino¡
Lo cierto es que Marta no ha recibido ningún mensaje con la clave, el banco que flores y yo nuevamente sin dinero.

Al llegar a mi hotel me han pedido que pagara cosa que he hecho con lo poco que me queda de unos dólares que llevaba para emergencias pero nunca supuse que podría darse una emergencia de este monto.
Para llegar hasta el día 21 de octubre debería de disponer de 1500 dólares como mínimo.

Descartado lo de alojarme en el hotel caro ya que no cobran de la visa con las terminales a las que estoy acostumbrada sino que se hacen una transferencia del importe que quiero obtener y volvería a tener el problema de la maldita conformidad telefónica por parte del banco.

He hablado con la patrona del hotel que ha hablado a la vez con la directora de la agencia de viajes llegando a la solución de enviar una transferencia a través de western Union. Es instantánea, la manda a Singapur a nombre de la empresa y cuando la reciba me hace el abono descontadas las pertinentes comisiones y otros cargos que en este momento estoy dispuestísima a aceptar.
Pendiente de que Marta tuviera un momento entre pacientes para hacerlo y decirme si ha ido todo bien, estuve allí clavada ante el ordenador mirando a cada momento si llega el tan ansiado de conformidad de transferencia.

Así pues otro día de hotel ante el ordenador y con los nervios a flor de piel. La patrona me ha dicho que coma lo que quiera en el restaurante que si no tengo dinero soy su invitada que cuando tenga dinero ya lo pagaré. ¡Qué amable¡
José está también pendiente de mi situación, me da como otra posible acción a emprender el pedir auxilio al consulado francés ya que no hay español para que me echen una mano pero se por buena tinta que no resuelven problemas económicos.

Para complicar más las cosas viajes Barceló me reclama 4 euros para hacer efectiva mi reserva de vuelo a Mexico. He aprovechado para pedir que me lo adelanten una semana pues no se si conseguiré suficiente dinero para tantos días.

Sé que en cuanto solucione este problema (que lo solucionaré, por supuesto) empezaré a disfrutar de estas tierras y espero en breve ni acordarme de lo mal que se está en esta situación pero lo que es hoy por hoy apaga y vámonos.

En momentos de dificultades , enfermedades, cuando se mueven las paredes y tiembla el suelo es cuando los autenticos dan el callo, los que están cerca incluso estando lejos.

He tenido a mi hija el día entero sufriendo y resolviendo conmigo mi problema.
A Lluis aún no le he dicho nada, con tener angustiada a Marta es suficiente cargo de conciencia, no quiero aumentarlo implicando a mi hijo también.

Erich, desde Austria mandándome mensajes interesándose por mí estado anímico.

José, pese que ayer era su cumpleaños, le robé el protagonismo de ese día ya que le tuve mandándome mensajes de apoyo y dándome ideas de que hacer, diciéndome que a donde me podía mandar dinero, incluso me mandó un plano de donde estaba el consulado francés ya que aquí español no lo hay.
Como él domina el ese idioma a la perfección se ofreció de hacer de intérprete por mail simultáneo que es la única forma de conectarse, no hay skype y facebook como en Vietnam, un día funciona dos no.

Gracias Jose y lamento haber estropeado tu día preocupándote por mí.

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